Viernes trece

Dos días sin hablar contigo. Enfadada con una de mis amigas por traerme a una ex amiga a clase, lugar donde no estoy para sentirme incómoda. Casi le grito a uno de mis profesores, que le permite todo a mis compañeros (hacer los deberes a clase, no hacerlos, copiarlos) pero yo, que lo hago todo, recibo todas las broncas. Ir a una academia de refuerzo cuatro horas para dicha asignatura, donde recibo otra bronca más, pero de otra asignatura. Y, de repente, cuando pienso en cambiar de nuevo, diciendo 'soy joven y no me ataré a nadie'... apareces, otra vez, de nuevo.
(si, hoy no tengo un buen día, inspiración, cero)